La seguridad no se trata de predecir el futuro, es más bien, estar preparados para cuando llegue.
Lo decimos porque ya son múltiples las solicitudes que recibimos sobre cómo prepararnos para los escenarios tanto pre como post electorales. En estas líneas no estamos apostando por uno u otro escenario, es una aproximación a recomendaciones preventivas para transitar por esta fecha minimizando los riesgos de seguridad.
Entender la realidad, el momento y el entorno. En estos climas de polarización resulta sencillo que pequeños conflictos y desavenencias escalen a situaciones de violencia. Evite caer en provocaciones, no se enganche en discusiones políticas para tratar de convencer a quién ya está convencido. A estas alturas del proceso ya todos sabemos por quiénes votaremos, aunque abiertamente no lo reconozcamos. Comprenda que mucha gente puede sentirse comprometida y hasta coaccionada hacia una tendencia u otra porque de ello depende su trabajo o el sustento de su familia. Está demostrado que el voto es secreto y cualquier comentario u opinión que sugiera lo contrario, es una violación a la ley. Las elecciones son procesos democráticos y pacíficos, y son la fórmula de la democracia para que todos nos pongamos de acuerdo. Así como el triunfo no debe implicar venganza, la derrota no puede traducirse en violencia. El 6D todos somos ciudadanos por lo que nuestro comportamiento cívico marcará el clima de la jornada. Conductas agresivas, impulsivas o de confrontación provocarán actitudes similares en los adversarios. Debemos ser vigilantes y nunca sumisos de allí, que conocer los derechos que nos amparan antes, durante y después de votar es nuestro mejor escudo frente a los abusadores. La altísima responsabilidad del árbitro electoral es clave en esta fecha. La tranquilidad de un país entero pasa por la credibilidad y confianza que genere. Recuerde además que el mejor sitio para protegerse si usted no se siente seguro en la calle es su propio hogar.
Informar o deformar. La tensión que se acumula los días de elecciones se traduce en la propagación de rumores e informaciones no de todo ciertas. Tenga el máximo cuidado con lo que lee y publica en las redes sociales. No crea que la información que usted produce o propaga no tiene consecuencias. En las redes sociales es realmente fácil identificar de dónde provienen informaciones no confirmadas. La recomendación es crear una pequeña red o chat alrededor de su sector, familia o amigos que produzca información oportuna y relevante que pueda servir para orientar positivamente a otros. Puede nombrar a un vocero de su red quién será responsable de divulgar datos confirmados. El objetivo es informar no deformar.
Previsión sí, contingencia no.Una máxima de la seguridad previsiva es prepararse para lo peor y esperar siempre lo mejor. Las fechas de elecciones no son días de contingencia, sin embargo ante la incertidumbre que generan es natural prepararse para cambios en las rutinas. En función de esto, evalúe si usted, su grupo familiar o su trabajo requiere un sencillo plan para el manejo de situaciones imprevistas. Diseñe un árbol de comunicación para mantener a su grupo oportunamente informado. La prever es tratar de ver por adelantado, no para generar angustia si no para producir tranquilidad. Recuerde que la seguridad está vinculada con las certezas y no con las incertidumbres. Un plan de previsión se ocupa de lo básico, lo ideal es que pueda operar con efectividad durante 72 horas. Prevea con prudencia los recursos necesarios para estar comunicado, alimentado e hidratado durante ese período.
La preparación para el 6D comienza por adecuarnos mentalmente a lo que realmente se va a decidir ese día. Tengamos actitud positiva frente al futuro y no la empañemos con sentimientos incontrolables de disturbios y violencia. La seguridad empieza por entender el entorno pero no para controlarlo, más bien para fluir con él.
@seguritips