mundo hetarárquico seguridad y herarquía

La seguridad frente al nuevo orden heterárquico*

Hemos llegado a los tiempos donde las categorías para clasificar objetos, individuos, sociedades, sistemas o ideologías han dejado de ser estáticas. Ya la política no se divide en izquierda o derecha, los sexos dejaron de ser sólo masculino y femenino, e inclusive, los Estados nacionales ahora responden a una amplia variedad de intereses y no se comportan como bloques monolíticos.

Estamos en la era de las heterarquías, es decir, en una nueva forma de reordenar el mundo, en el cual las relaciones entre las personas, organizaciones y hasta las sociedades pueden clasificarse de múltiples formas, con tendencia a privilegiar estructuras más flexibles conformadas en redes, en lugar de las clásicas pirámides jerárquicas.

Lo heterárquico divide o une de acuerdo con los intereses, tiende a ser polivalente y hasta cierto punto indiferenciado, cuando no responde a una determinada clasificación. Son sistemas en los que sus elementos poseen la potencialidad de ser clasificados de diversas formas y cada uno se entreteje horizontalmente en red con sus pares.

Al no poseer una categoría definida, las partes de un sistema heterárquico pueden ordenarse en función de sus propósitos, por tanto, un elemento puede ser aliado ante determinado objetivo y adversario frente a otro. El orden heterárquico es un reino indiferenciado y no jerárquico que toma forma y se alinea (converge) en función de una unidad de propósitos, en el cual, una vez logrado su objetivo, se funde en su propia red, para ajustarse de nuevo en términos de nuevos intereses.

Riessgos Líquidos Alberto Ray desafíos a la seguridad global

 

El planeta se confronta a un nuevo paradigma de organización que reta la noción fundamental del principio de identidad sobre el que se basa la filosofía occidental, A = A, frente a ello, toda referencia anterior resulta contradictoria, pues ahora, algo puede ser distinto de sí mismo, y ser clasificado según su cambiante interés o propósito.  Se trata de un nuevo modo de ordenar al mundo. Es el nuevo orden heterárquico.

Frente a este panorama ha llegado el momento para que estas fuerzas, hasta ahora indiferenciadas, se muestren, quizás porque estén alineadas en sus propósitos, o porque se sientan amenazadas por contrafuerzas que intentan oponérseles. En todo caso, parecieran tener ventaja y estar decididas a avanzar en múltiples planos y agendas.

El tema clave es la antifragilidad del orden hetarárquico, pues es en sí mismo, un poderoso sistema de inhibición para aquellos que pretenden cambiarlo o desmontarlo por las vías tradicionales o institucionales del pasado reciente.

Siendo así, el reto que tenemos por delante es de grandes proporciones, por ello, se impone en primer término, hacernos conscientes de estos procesos y, en segundo lugar, aprender a identificar los flujos y las conexiones en este tablero multidimensional de líneas borrosas en el que nos ha tocado jugar.

Los primeros en entender y asumir un modelo de orden heterárquico fueron grupos trasnacionales de terrorismo y delincuencia organizada. De allí, precisamente, han derivado su poder para adaptarse a la complejidad de estos tiempos y no solo sobrevivir, sino fortalecerse.

Pero, la heterarquía más recientemente ha llegado a nuevas fronteras y ahora es una de las formas preferidas de organización de las grandes empresas tecnológicas, los gigantes farmacéuticos, las corporaciones pertenecientes al Partido Comunista Chino y hasta algunas ramas del Estado norteamericano.

Las heterarquías son la respuesta natural frente a los tiempos que vivimos. Fallar en entender e incorporar sus modelos a las organizaciones es sucumbir a los riesgos líquidos de los que he hablado en tiempos recientes.

Para la seguridad, los nuevos órdenes heterárquicos son un doble desafío, pues, se requiere entenderlos en profundidad para poder neutralizarlos o protegerlos, ya que, las corporaciones del futuro no tendrán más opción que adoptar este modelo, y al mismo tiempo, el delito, desde hace algún tiempo, se organiza bajo estas mismas estructuras.

@seguritips

*Este artículo es un extracto del libro Riesgos Líquidos – Disponible en Amazon

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